Regodearse en el dolor y re-vivir experiencias traumáticas juntándose con otra gente para torturarse mentalmente alimentando la basura psicológica es quedarse detenidos en ese mismo pasado.
Regodearse con las heridas no tiene gollete, me parecía mucho más interesante plantearnos que hacemos con nuestra historia hoy tal como recibimos esta sociedad, herencia de nuestros padres.
Regodearse con la belleza y el polo positivo, carga energías perdidas, pero no conviene olvidar la existencia del polo contrario, que las carga igualmente en el sentido negativo.