Al contrario de los cerdos, las gallináceas, las vacas y otros animales domesticados; los perros se han ganado un lugar especial en el corazón de los humanos.
De aquel período data la expresión popular de pollos de fomento, para referirse a las nuevas variedades de gallináceas que llegaron a nuestra tierra para no ir se jamás.
Esto infiere, claro está, un interés político en todo este asunto y, juzgando por quiénes serían los beneficiarios, no resultaría difícil encontrar la estructura detrás de toda ésta gallinácea.