No debemos andar siempre cariacontecidos y tristes, negándonos a testificar de victoria alguna, por el temor de lo que pudiera haber sucedido o pueda suceder sin nuestra voluntad.
Y los dos príncipes esposos de las que habían preparado las bandejas se mostraron muy cariacontecidos, y contestaron que aquello era una cosa que escapaba a su entendimiento.
Se enfervorizaba al explicar ante el auditorio, escéptico, reticente, cariacontecido, los beneficios por lograr una patria libre, justa y soberana desde ese esfuerzo colectivo.